Mi sangre en palabras.
Ríos de tinta que sueños surcaban,
Muertes, recuerdos, batallas
Y un lugar donde narrarlas

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Teletransporte

 Hoy estaba pensando que hacer con mi vida mientras escuchaba una canción que hacía tiempo que no ponía en Youtube, la de Umbrella pero cantada por The Beisbol, cuando decidí que era hora de cambiarme de mundo, de activar mi ataque teletransporte y evadirme de ese mundo de corrupción y violencia que estoy tan harto de retratar entrada tras entrada y que estoy harto de ver día tras día cada vez que echan a una familia a la calle o que un sindicato busca conseguir algo explotando su caso, cada vez que enciendo la tele y sale Matías Prats con su a veces incomprensible humor. Y la verdad es que, a parte de que el hombre del tiempo se llame Brasero, considero que lo más divertido que se puede ver en las noticias de hoy en día es la carrera anual de esposas a caballito que celebran en no sé qué pueblo de una zona rural de Escocia.
Así que decidí buscar un mundo distinto, en el que primasen otros valores. Un mundo en el que se premiase la honradez, la honestidad y las ganas de hacer las cosas bien. Un sitio en el que el trabajo en equipo fuese la única forma de alcanzar los objetivos, en el que nos preocupásemos por el bienestar de los demás como si el nuestro dependiese del suyo, o como si nos diésemos cuenta de que realmente es así. Un mundo en el que la gente no te guarde rencor si ganas tus batallas utilizando el juego limpio, en el que tratar a los demás con aprecio y respeto fuese motivo de admiración y orgullo entre los que te conocen y los que no.
Quise buscar un mundo en el que, sin pensarlo ni un segundo, gente de todos los lugares y todos los pensamientos se unieran para evitar que ganen los malos, en los que la gente que ocupa los puesto altos de nuestra sociedad no tendrían lugar ni en la alcantarilla más apestosa...
Un sitio en el que la aventura signifique viajar, y no irse de botellón cada noche. Un mundo en el que la amistad dura para siempre, marcada en los mismos entresijos del mundo...
Y lo peor no fue sólo el darme cuenta de que ese mundo era casi imposible de encontrar, si no el comprobar que sólo podía acceder a él si encendía la NDS y metía el cartucho de Pokémon. Porque aunque nos parezca mentira, hemos creado un mundo tan retorcido que el mundo que querríamos para nosotros y nuestros seres queridos sólo es posible en los videojuegos para niños...

miércoles, 26 de septiembre de 2012

 
Ahora que el Partido Popular ha demostrado ser de todo menos del pueblo, y que el Socialista ha aclarado que mientras puedan robar le da igual la sociedad, ahora que el líder de la liga española es un equipo que defiende la independencia catalana y que sus directivos lideran manifestaciones antiespañolas, ahora que el INEM es la empresa más numerosa del país, que la Junta y el Gobierno se pelean para ver quién hace más recortes.
Ahora que la generación que viene ve como una seña de identidad no ser capaz de escribir una frase sin cometer una falta de ortografía, que el primer premio Nobel de la Paz que se entrega "en visión de los actos y méritos futuros" (Obama) ha demostrado ser un fraude, ahora que la duda no es qué partido político ganará si no qué partido nos robará menos.
Ahora que la gente entiende protesta por destrozos, con el gasto que eso supone para todos nosotros. Ahora que dos clubes de fútbol que deben entre los dos 1800 millones a Hacienda (es decir a todos) aseguran haber ganado 70 millones netos entre los dos la temporada pasada (sí, Barcelona y Madrid) mientras a los funcionarios se les baja el sueldo.
Ahora que la sociedad española está perfectamente representada por sus políticos en una buena mayoría, ya que está enferma y hecha una mierda, ahora que la minoría somos los que pensamos y creemos que no merecemos esto.
Ahora es, más que nunca, cuando tenemos que salir adelante. Cuando tenemos que demostrar que la generación NINI no es porque no queramos, que significa NI encuentra trabajo NI puede pagar una carrera. 
Ahora es cuando hay que demostrar quienes somos y de qué estamos hechos. Es cuando hay que no somos ricos, famosos y guapos, pero que tampoco estamos tristes aunque no coreen nuestros nombres. Demostrar que las únicas gargantas que necesitamos escuchar llamándonos son las de nuestros amigos y familia, porque somos gente capaz de sacar una sonrisa en los peores momentos. Y porque somos capaces de sentirla.
Ahora es cuando hay que alzar esa cerveza, besar a esa chica y agarrar el mundo con las manos. Porque si no nos quieren dejar, es cuando hay que demostrar que de verdad somos esa gente maravillosa que aprovecha las oportunidades que le da la vida. Que improvisa partidos de fútbol, aunque al final nunca se jueguen.
Ahora es el momento de ser felices, porque la felicidad hay que buscarla, pero siempre acaba por llegar. A veces sólo hay que seguir buscando. Otras veces nos llega aunque no la esperemos. Pero siempre se acerca más si la esperas sonriendo.
Ahora es el momento de demostrar que esa marca España que tanto quieren vender está viva, y no sólo en sus playas y sus deportes, si no en su gente. Ahora es el momento de maravillarse por amar y por ser amado, de dar las gracias a todo lo que te ha llevado hasta tu pareja y tus amigos.
Porque ahora es el momento de empezar a ser feliz sin reservas, con responsabilidad y cabeza, pero sin reservas. Porque ahora, es un momento tan bueno como cualquier otro para coger el móvil y llamar a alguien para quedar y ser feliz.

miércoles, 22 de agosto de 2012

Hola



Ahora que volvemos al cañón, no me queda si no saludar a los dos tipos de personas que son el centro de nuestro blog.

El primero, vosotros los lectores. Los que nos apoyáis y los que no. Habéis seguido visitándonos y se agradece, cuando comentáis y cuando no, y cuando a veces nos decís eso de “oye que hace tiempo que no escribís”… pues eso también se agradece ^^.

El segundo, vosotros, putañeros y drogadictos, políticos corruptos, niñas más putas que las gallinas, reyes de escopeta de caza (tendríamos que hacer ese nuevo palo en la baraja española por lo que parece), ladrones, idiotas, estafadores, hijos de puta varios, independentistas, terroristas, abusones, traficantes... a vosotros también os digo hola.

 Os digo hola, ya que vosotros, la calaña del mundo, al fin y al cabo sois la mayoría en este pobre país en el que las frases más filosóficas se dicen en anuncios de compresas ("¿a que huelen las nubes?") y de cerveza ("a veces lo bueno está tan cerca que no puedes verlo").

Por que formáis la mayoría de ese grupo que no se daría cuenta de que esta frase está mal escrita y que se escribe “porque”, y lamentablemente sois tantos que si cada uno me diese un yen (que no hace falta un euro) tendría para pagarme otra carrera universitaria (sí, con su subida de tasas y sin beca ni nada).

Os digo hola porque, cuando no me apetezca escribir desvaríos o sobre otro tema cualquiera, mis dedos volverán a escribir sobre vosotros, volveré a insultaros y a ca… en vuestros muertos, que al fin y al cabo es lo que os merecéis.

Y, qué narices, os digo hola porque quiero y es lo que tiene que éste sea mi blog. Si queréis, lo leéis; si no, pues no. Ya que a veces, las verdades duelen.

Así que hoy termino con una frase de esas de anuncio: ¡Mándales a tomar Fanta!


domingo, 1 de julio de 2012

Y a veces me da igual


A veces me siento un poco desorientado en los tres planos de la realidad; persona, tiempo y espacio.

Me doy cuenta cuando me encuentro buscando, buscando cosas que hacer, formas de vivir, heridas que lamer, y me doy cuenta cuando veo que las encuentre o no me va a dar igual porque voy a seguir sin saber del todo qué hacer para ser más feliz, porque voy a seguir sin saber si quiero saberlo o quiero que mi vida continúe como hasta el momento, con la cantidad de felicidad suficiente como para agradecer cada mañana que llega pero sin que me enturbie el resto de los sentidos.

Esas veces me dejo llevar por la imaginación y la locura a partes iguales, y dejo que mi subconsciente me muestre algunas imagines casi absurdas pero increíblemente reales, de aquello y aquellos a los que quiero y a los que sigo queriendo en mi vida mientras ésta dure. A veces, esta reflexión me devuelve a la orientación adecuada, otras me sigo perdiendo en un estado de incomprensible conformismo positivo en el que me doy cuenta de todo aquello que me hace sonreír cuando me acuesto igual que cuando me levanto.

Eso que puede ser un día en la playa con la compañía adecuada (independientemente de sus consecuencias para la salud), una chapa de Harry Potter o un partido de fútbol mientras mantengo conversaciones semi-existencialistas.

Y lo peor, o lo mejor, es que esos pequeños instantes de despiste en los que mi cerebro desconecta de la vida y descubre lo maravillosa que puede llegar a ser, son muchos a lo largo del día, y los momentos que me vienen a la cabeza en esos ratos de electroencefalograma prácticamente plano, esos instantes que me hacen sonreir, dejar de bucar heridas (o en días como hoy quemaduras) para autocompadecerme, son cada vez más frecuentes y duraderos.

Aunque, y esto es de agradecer, también sigo teniendo mis momentos de autocompasión y duda existencial. Ya que al fin y al cabo, eso también forma parte de la oferta de emociones y sentimientos que tenemos a nuestra disposición, más variados que el catálogo de colores de Benetton o los modelos de zapatillas del Decathlon.

Y si no, que se lo pregunten a mi cada vez más amigo Wall-e, y él ya se acordará de recordárselo con su frase más famosa ("Eeeeevaaaa") que nos viene a recordar que a veces lo más importante puede ser la persona de nuestro lado.


lunes, 18 de junio de 2012

Diario de un psicópata

34  de Junagosto de 26292 antes o después de Cristo (eso lo dejo a tu elección)

Querido diario:

Comienzo pidiendo perdón a las hadas que viven debajo de las teclas de mi ordenador y sufren mis constantes agresiones, como si no tuvieran suficiente con vivir rodeadas de pelusas y demás mierda indescriptible. Para ellas va todo mi apoyo y solidaridad, aunque siendo sincero me da exactamente igual como se sientan las meretrices esas, siempre dando por culo con las varitas y tratando de interferir en las vidas de los demás, Dios como las odio. Dicho eso me dispongo a dar el parte del día, ahora mismo en compañía del duende gruñón y del dragón que escupe oro cuando le rasco las orejas.

A primera hora de esta mañana mi "fiel" compañero Charmander me vio destapado y con "buenas intenciones" fue a echarme una sábana por encima. Entrecomillo lo de las buenas intenciones porque el muy cabrón me metió en una funda de cadáveres (que ya estaba ocupada, por cierto) y después me enterró bajo una montaña de edredones nórdicos. No contento con eso y viendo con sus gafas de rayos X que estaba poniendo caras raras entendió que seguía teniendo frío así que me "bautizó" con varias llamaradas que nos dejaron al fiambre y a mí hechos cenizas (de hecho la familia del fiambre estará eternamente agradecida). Presa de la furia y cual ave fénix resurgí de mis cenizas y propiné una señora paliza de artesanía a semejante hijo de la grandísima. No exagero si digo que de no ser por la tele la antena y el bolsito pasó de ser Charmander a ser Tintiwinki (o cómo cojones se escriba), en cualquier caso pasó a ser un individuo morado que escupía fuego y lloraba leche de burra ovetense, no entro en más detalles porque... ah sí, porque escribo yo y no me sale de donde me tiene que salir.

Guiado por el sabio consejo del vagabundo borracho y con la ayuda del niño muerto me dispuse a curar los moratones de charmander escupiéndole piedras recién extraídas de riñones humanos, extraídas por cirugía abierta sin anestesia, obviamente. Las piedras hicieron efecto y Charmander ya no tenía moratones, sino que ya era una masa amorfa llena por completo de cortes y teñida de un rojo sangre brillante ciertamente atractivo. El señor Drácula no pudo resistir la tentación y se dió un buen festín. Los protagonistas de una película de seudovampirosmoñas destinada a un público tirabragas y potencialmente hormonado reclamaron su parte del pastel pero el siniestro conde respondió con amenazas provocando la huida despavorida de estos individuos/as.

Todas mis alucinaciones permanecían atentas al lamentable espectáculo que se había formado, todas salvo el duende gruñón antes mencionado. Es necesario puntualizar que todo mi éxito o fracaso en las matemáticas se lo debo a él, yo me quedé en las divisiones con decimales y desde entonces sólo soy un "mandao" del duende, si me permiten la expresión (y si no me la permiten se joden). Pues a lo que íbamos, el duende permanecía en su mundo de fantasía autista psicotrópica potenciada por el abuso de LSD y de tabaco tradicional irlandés elaborado por Vikingos tuertos, cuando de repente sumido en sus pensamientos demostró que P=NP. (Ni puta idea de lo que significa, como os he dicho, me quedé en las sumas con dos cifras, si, he dicho eso pedazo de tiquismiquis, vuelve para atrás lo compruebas y si tienes lo que hay que tener me dices que estoy equivocado) . Así que se apresuró a advertirme emocionado, deduje que debía ser importante por lo que me decidí a pasar todo a limpio mientras controlaba mis tics suicidas y anuncié a la comunidad científica internacional  mi descubrimiento, el cual dieron por válido de inmediato, lo que me supuso la concesión de la medalla Fields y el millón de euros que otorga el Instituto Clays.

Después de esto recibí la visita de unos individuos extraños que me reclamaron la propiedad intelectual de mis documentos, a lo cual accedí encantado. Ellos, aterrorizados por mi nula resistencia decidieron asesinarme, por si acaso. A pesar de lo que pudiera pensarse, no es esta una carta de venganza desde el más allá, sino de agradecimiento, sólo quiero que mis queridos miembros de la conspiración Judeomasónica puedan disfrutar de toda clase de lujos y de señoritas dispuestas a satisfacerles sexualmente en todo lo que pidan, por todo ello se despide atentamente no sin antes saludarles efusivamente:

Un pringao.


lunes, 11 de junio de 2012

Desvaríos de un estudiante


Hoy ando metido en esta especie de habitación paralela al continuo espacio-tiempo en la que hace tiempo que vivo. Más continuamente desde que la US decidió ponerse en huelga y acabar con las clases, tal vez el único método de contacto que mantenía con la realidad mientras los apuntes hacían todo lo que podían por absorberme y volverme tan loco como los pacientes que estaba estudiando.

Ahora que eso tampoco lo tengo, vivo en una especie de vida anestesiada en la cual las horas trascurren entre vueltas y vueltas y vueltas alrededor de las mismas páginas (que me deben de conocer muy bien pero yo no soy capaz aún de aprendérmelas del todo, las muy jodidas siguen intentando ganar la batalla) y los días sé que pasan porque cada tres comidas vuelve a llegar una dulce que supongo que será el desayuno, y porque en el Marca van cambiando el número de días que faltan hasta el próximo partido de España. Y no, no es broma, me aprendí que mi primer examen es tres días después del primer partido y un día antes del segundo, y gracias a Marca voy viendo el tiempo que me queda de agonía.

Por otro lado, esta especie de anestesia en la que vivo no impide que los nervios, estallidos incomprensibles de ira contra las hojas amontonadas y algún mosquito que osa adentrarse en mi territorio y sensación de cansancio impotente vengan a mí cada vez más intensos. Es decir, vivo en un mundo aparte pero con las mismas jodidas emociones que en el mundo real. Sólo que sin sol, salvo cuando enciendo el Skype.

Y a parte están esos pequeños vicios que me hacen perder tanto tiempo…el comer, el responder a mis necesidades puramente fisiológicas (cada uno que entienda lo que quiera) y dormir, y encima es que cuando intentas sobreponerte a ellas y tomarte un buen (marca de bebida energética con alto contenido cafeínico) siempre hay alguien que te dice: “Sabes que eso es malo, ¿verdad?” y tú piensas “sí, tengo cierta capacidad mental y además ya me lo has dicho”… la cosa cambia cuando empiezan las palpitaciones y ataques de ansiedad claro, y empiezas a buscar métodos alternativos para quedarte despierto…

Por eso el tema vuelve a ser que sigo aquí encerrado mientras empiezo a dudar de mi salud mental (a pesar de que el Wall-e de mi pared últimamente me dice que estoy bien de la cabeza, empiezo a pensar que tiene algo en mi contra por cómo me mira) y me temo que durante los próximos días no tendré más remedio que ir sumiéndome más y más en esa especie de submundo que forma mi habitación con el resto de la realidad, que sólo se interesa por mí para saber de los temas de bioética salvo por contadas excepciones, antes de poder volver a salir a la luz del día.

Y cuando eso llegue, me volveré a sumir en un mundo de gente viva, real y de carne y hueso (creo que sí, al menos) a no ser que el apocalipsis zombie ya haya sido una realidad. Y tras acostumbrar mis ojos a luz del sol (el de fuera, no el del Skype), sentiré que ya soy un 25% más libre, aunque intentaré no volver a aparecer por este lugar lúgubre y oscuro que otrora fue una habitación y que ahora es un caos de folios, latas en la papelera (el baloncesto vale para despejarse) y muchas cosas que me recuerdan todo lo que no estoy pudiendo hacer, y que en cuanto sea libre dejarán de estar visibles para placer de mi aburrimiento.

viernes, 8 de junio de 2012

Dar ejemplo


Hoy vivimos en un país en el que los partidos políticos que tienen el poder (sea cual sea su color, y mande en el gobierno, las comunidades o los ayuntamientos) compensa los millones que nos han dejado de deuda mediante la tijera y la sangría. En el que el Rey se va de safari y, según dicen las malas lenguas, de queridas mientras parte de la población tiene que hacer malabares para poder pagar la luz, el agua y la comida, que cada vez cuestan más.

En este país, el partido de la oposición se dedica a oponerse a todo lo que opine el gobierno, sin importarle siquiera si lo que va a decir es lógico o un saco de estupideces que arrojan como el que da de comer a los cerdos.

En este país, los bancos, nuestros representantes económicos, nos roban nuestro esfuerzo a base de intereses por los préstamos que no queríamos pedir pero que nos obligaron a solicitar después de inflar el precio de las casas. Mientras, cobran también de nuestros impuestos rescates multimillonarios, mientras sus directivos tienen sueldos de reyes.

Un país en el que los representantes de nuestra justicia roban, malversan y son condenados por todo tipo de delitos, junto a sus amigos políticos y banqueros. Y en el que los medios de comunicación están comprados y manipulados hasta el punto de que Italia parece el sumun de la libertad de expresión.

Vivimos en un país en el que esos son los que nos representan. Nos representan a nosotros, que somos el primer país en donaciones de órganos y que contamos con un sistema de donación de sangre puntero en el mundo.

Nos representan a nosotros, uno de los principales pilares de la Cruz Roja, de Cáritas y de miles de ONG y organizaciones de voluntariado. A nosotros, que en cada escuela tenemos planes de voluntariado, que en cada ciudad tenemos asociaciones para ayudar a niños autistas y con miles de problemas.

Nos representan a nosotros, los que limpiamos el Prestige en la “Costa da Morte” y el chapapote que liberaban los barcos en Algeciras mientras la Junta lo escondía del conocimiento público. Que nos volcamos en Lora con el terremoto y fuimos a Sumatra cuando el Tsunami.  

Nos representan a nosotros, que tenemos muchos de los autores inmortales de literatura y poesía, ellos que llegan a ministros sin tener estudios. Ellos que permiten que individuos como Dan Brown (si puedo, será la última vez que manche una entrada con su nombre) presente a nuestras ciudades como tercermundistas, decadentes y pobres, nos representan a nosotros, que participamos en estudios contra el cáncer, el VIH o el Alzheimer.

Lo único en lo que saben representarnos es en el palco de un estadio de fútbol, y aún allí dan la nota. No, donde saben representarnos es en los banquillos de acusados, las revistas de cotilleos y en la boca de todos los malhablados de Europa.

Qué pena que nuestros representantes no se parezcan un poco más a las personas a las que representan.

lunes, 23 de abril de 2012

Flexibilidad


flexible.
(Del lat. flexibĭlis).

1. adj. Que tiene disposición para doblarse fácilmente.

2. adj. Que en un enfrentamiento se pliega con facilidad a la opinión, a la voluntad o a la actitud de otro o de otros. Carácter, persona flexible.

3. adj. Que no se sujeta a normas estrictas, a dogmas o a trabas. Ideología, legislación flexible.

4. adj. Susceptible de cambios o variaciones según las circunstancias o necesidades. Horario, programa flexible.

5. m. Cable formado de hilos finos de cobre recubiertos de una capa aislante, que se emplea como conductor eléctrico.



Qué duda cabe, es la palabra de moda mal que nos pese.  Raro es el telediario en el que no aparezca la dichosa palabra en innumerables ocasiones, frecuentemente en boca de políticos. Pero yo me pregunto, ¿qué acepción de las que reconoce la RAE entienden los políticos cuando hablan de ella? Uno que es malpensado tiende a pensar que tratan de enmascarar sus verdaderas intenciones hablando de flexibilidad cuando sus voluntades van encaminadas a coartar las libertades de la ciudadanía. 


La flexibilidad es una cualidad interesante y deseable en algunos ámbitos, no encuentro  demasiada utilidad a un muelle de cristal por ejemplo. Sin embargo yo no me fiaría mucho de una construcción con paredes de gelatina, la rigidez es necesaria en muchas ocasiones.


Dejémonos de metáforas, es absolutamente increíble la estrategia manipuladora tan simple como efectiva que consiste en repetir mil veces una palabra, una idea, de manera que en la mente del españolito medio flexibilidad suene a algo provechoso y de esa manera colarle todo lo que se deje colar. Demagogia barata, sí, barata pero no por ello inútil y a mi juicio potencialmente peligrosa. Van cambiando la palabra clave de su discurso en función de las necesidades del momento (son flexibles en ese aspecto, valga la redundancia) y ya estamos acostumbrados a otras por el estilo como talante, diálogo etc etc.  


Yo sinceramente no sé que beneficio puede tener la flexibilidad cuando  en realidad hablan de inestabilidad laboral o cuando el tema es una subida indiscriminada y abusiva de tasas universitarias, considerando un privilegio un derecho fundamental y poniendo en jaque el futuro de una parte de la población que, supuestamente, "nos va a sacar de la crisis" como ellos dicen. Obviamente todo esto sin pararse a reflexionar sobre el por qué de la fuga de cerebros que vivimos (fuga verdadera, nada de películas casposas)  que suponen una auténtica sangría a las arcas públicas. Opino que es estrictamente necesario recortar en innumerables gastos innecesarios, como por ejemplo las condiciones laborales de sus señorías sin ir más lejos, pero pobre iluso de mi,  antes de que estos señores actúen con coherencia un sólo olmo me habrá dado toneladas de peras. 



Llegados a este punto lanzo un aviso a navegantes, en especial a los amigos íntimos del argumento de "y tú más", me siento profundamente vinculado a un partido político, de hecho estoy afiliado al mismo. Es un partido francamente especial pues tiene un único miembro y su pilar central es la soledad dentro del partido de dicho individuo, que no es otro que el que les habla.



jueves, 22 de marzo de 2012

Uno


Ya está. Ya es realidad, se ha cumplido el segundo paso de los que nos marcamos al comenzar a escribir este blog. El primero fue llegar a las mil visitas, cosa que logramos hace ya tiempo. El que acabamos de lograr, cumplir un año.

Han sido doce meses en los que hemos reído, llorado, aguantado todo tipo de dificultades y encontrado tantas alegrías como piedras en el camino. Hemos caído y nos hemos levantado, y todo os lo hemos intentado plasmar en nuestras entradas.

Son 47 las que hemos hecho hasta hoy, 47 veces que os hemos contado nuestros sentimientos y nuestras dudas y protestas, en las que os hemos hecho partícipes de todo lo que hemos visto, en las que os hemos intentado plasmar esas injusticias que encontramos en el mundo que nos rodea, o esas impresiones que nos han producido cosas tan distintas como el amor o la amistad.

Durante este año hemos tenido gente detrás para animarnos y aconsejarnos, desde en la estética del blog hasta para los temas. Hemos conseguido enganchar a más de uno, y queremos creer que hemos conseguido hacer que os guste lo que publicamos y que disfrutéis leyendo lo nuestro al menos una tercera, o cuarta, o quinta parte de lo que disfrutamos nosotros escribiéndolo.

Ha habido momentos en los que, la vorágine de la vida, e incluso la pereza, han dejado en meros borradores muchas de las ideas que hemos llegado a tener o incluso a maquillar, quedando muchas veces como tachones y hojas muertas perdidas en algún rincón. Sin embargo, también hemos tenido gente ahí delante que, con sus visitas subiendo en nuestro contador, nos han dado el toque de atención que necesitábamos para desempolvar el cerebro y ponernos a trabajar, y os lo agradecemos.

Hemos volcado bastante ilusión en este proyecto, con las secciones que incluimos y con todo lo que publicamos. Y ahora, que la "pequeña criatura" tiene ya un año, no queda si no seguir ilusionándonos.

lunes, 5 de marzo de 2012

Héroes anónimos

Hoy tenía ganas de protestar. Protestar porque el mayor grupo “apolítico” de la historia de España, se manifiesta acompañado de miembros del PSOE. Porque la política se forma como un perro de presa contra los derechos de los ciudadanos, sea cual sea el color de unos y otros. Porque la prensa está comprada y no permite que nos enteremos de los hechos tal y como son.
Sin embargo, no quiero escribir protestas y quejas, no hoy. Hoy he visto una película en la que salía un héroe, uno que reflejaba a decenas de millones de héroes reales, de carne y hueso. Unas personas que sin poderes mágicos, son capaces de hacer magia todos los días para dar de comer a sus hijos, levantándose todos los días antes de que lo haga el propio sol. Todas esas personas que, sin tener ninguna espada, luchan cada mes contra el banco, los jefes, los políticos y las deudas, sólo para dar de comer a sus hijos. Que, como el de la película de hoy, no entienden de cosas imposibles, sólo de ciertas dificultades a las que vencer.
Esos héroes que se disfrazan cada día de persona normal, de obrero, de funcionario, de parado, como haría Clark Kent, pero que no se quitan ese disfraz de persona corriente para hacer sus heroicidades, porque su ropa de héroes la llevan muy adentro. Y que no tienen a nadie detrás para que narre sus grandes hazañas.
Pero el peor enemigo con el que se tienen que enfrentar a menudo esos hombres y mujeres son las propias personas a las que tienen que proteger. Esos hijos que responden, que protestan, que no valoran muchas veces todo lo que hacen por ellos. Nosotros, que culpamos de nuestros problemas a los que nos ocultan lo mierda que es el mundo todo el tiempo que pueden. Nosotros, los hijos, que lo pagamos todo con los que hacen malabares para pagar todo lo que hacen por nosotros, nuestros caprichos, nuestra educación, lo que comemos.
Tal vez sea hora de empezar a agradecer todo lo que nos dan, entre otras cosas, su vida. Tal vez sea hora de devolverles un poco de todo ese cariño.

jueves, 23 de febrero de 2012

Duerme

Duerme y sueña. Déjate llevar a ese mundo  en el que las cosas buenas ocurren y se hacen realidad, durante un momento o durante muchas horas. Ese lugar donde las cosas malas son sólo algo pasajero, que no seguirán al despertar.
Ese mundo, raro, ingenioso, donde todo es posible y tú eres capaz de todo, de amar, de luchar, de acabar con guerreros más fuertes y grandes que tú. Ese universo paralelo que se mantiene durante siete horas, tal vez ocho. Ese mundo que te absorve, y que repara tus fuerzas cuando lo necesitas.
Aprovéchalo, usa la mejor pastilla contra el dolor, la mejor medicina contra la pena. Mira por esa ventana. Duerme, descansa, déjate llevar. No te preocupes por lo que pueda pasar, allí estarán las personas a las que quieres cuando despiertes, y las que te quieren a tí. Allí estarán cuando necesites consuelo, apoyo o un interpretador de sueños. Cuando alguien tenga que calmarte en un mal sueño, o abrazarte para que el bueno sea aún mejor.
No temas. Sueña, sueña dormido. Y sobre todo, sueña despierto. Porque creer algo es el primer paso para que ese algo se cumpla.

lunes, 13 de febrero de 2012

El día a día

Es… ¿cómo describirlo?…Es como…¿volar? Sí, como volar en el cielo, pero no cuando está azul, si no en uno de esos días de tormenta, en los que el viento te tiene a su merced. Ese viento que te da algo de miedo, pero que te hace respirar. Es como andar, andar en el mar. Satisfacer un deseo, sabiendo que nunca más tendrás que mirar atrás.
Es como correr hacia el vacío, hacia un precipicio que se abre delante de ti, que te espera y que te sonríe. Es un subidón de adrenalina, como ser soldado en una guerra, persiguiendo un objetivo.
Es como caer en un sueño, te pone el corazón a cien. Aún más, a mil. Es una lucha, una obsesión, una agonía… es una de las mejores sensaciones que se pueden vivir. Es hacer puenting, paracaidismo, y desear que nunca llegue el suelo, desear seguir cayendo y disfrutar de las vistas, del aire y de la sensación de vida.
Es emoción, y seguridad. Es saber que siempre va a estar ahí esa mano amiga. Que da igual lo que pase porque estará a tu lado. Que si las lágrimas, la oscuridad o la falta de fuerzas te hacen caer podrás agarrarte a su mano.
Es contar con ella, con una amiga, una confidente. Saber que siempre podrás llamarla, y que si no te coge es porque está tan cerca que puede abrazarte. Es sentir que confía en ti, en tu presencia y en tu compañía.
Es querer viajar. Envejecer. Vivir. Es querer darle la vida. Es, simplemente, quererla.

jueves, 2 de febrero de 2012

De regreso

Tras un par de meses de espera, hemos regresado con fuerza. Es cierto que hemos dejado de contaros nuestros sueños, nuestras dudas y nuestras críticas sobre esta sociedad que nos parece injusta, pero no hemos dejado de pensar y de sentir muchas cosas que os queremos ir contando.

Estamos preparando varias entradas para publicar cuando tengamos un poco más de tiempo, junto a otros trabajos más a largo plazo que estamos haciendo con mucha ilusión. Os pedimos un poco más de paciencia.

Por supuesto, queremos agradeceros que aún sigáis abriendo nuestro blog para comprobar si hemos publicado algo nuevo, y que nos riñáis al ver que no lo hemos hecho. Os debemos un año casi de apoyo (sí, este es nuestro duodécimo mes de blog) y queremos compensar los momentos en los que no hemos sido tan regulares con otros doce meses más de letras y versos.

Prometo, sin embargo, no haceros esperar hasta marzo y publicar algo la próxima semana.